ROBERTO RAMÍREZ BRAVO /
Acapulco, 26 de febrero de 2021.
Parece un hecho ineludible, o que al menos así refieren las encuestas que se han conocido, tanto la de Masive Caller, como la que acaba de publicar El Heraldo, de encuestadora Enkoll, o la que dieron a conocer académicos del Iiepa-Ima, como los corrillos y las voces callejeras: en Guerrero, para la gubernatura de 2021, hay una preferencia por género varón y, en los dos principales partidos que competirán, los personajes punteros son los mismos: Félix Salgado Macedonio en Morena y Manuel Añorve Baños en el PRI.
Fuera de estos dos personajes, hay variaciones en las diferentes apreciaciones, sobre qué tan lejos quedan los demás respecto de los punteros. Por ejemplo, El Heraldo coloca a Salgado Macedonio en primer lugar, pero seguido muy de cerca, en virtual empate técnico, por el delegado federal Pablo Amílcar Sandoval Ballesteros, mientras que Masive Caller da 24 puntos de diferencia entre uno y otro, en favor del senador.
En el PRD, por otro lado, aparece en una medición Evodio Velázquez como puntero y en otra Carlos Reyes Torres, lo que indica que no hay uno que aparezca definido como prospecto.
El punto es que estas mediciones son, como bien se sabe, apenas una fotografía, en el mejor de los casos, de cómo están las cosas en este momento, y siempre de acuerdo al sesgo que le dan las empresas encuestadoras. Por ejemplo, hay otros aspirantes que ni siquiera son visualizados por las empresas, como Alberto López Rosas y otros que, sin pertenecer al partido, se incluyen, como Beatriz Mojica Morga y Luis Walton, que aparecen entre los aspirantes de Morena.
Con todas las reservas que estos detalles implican, las dos figuras hasta este momento en las que hay coincidencias, son el de Morena, Félix Salgado, y el del PRI, Manuel Añorve Baños. Si en estos momentos la gente tomara una decisión (y si pudiera realmente tomarla), ellos abanderarían respectivamente a sus partidos para la elección de gobernador.
¿Pero cuál será el criterio que cada partido definirá para elegir a su candidato? Por estatutos, Morena tendría que inclinarse a partir de la encuesta, como ya lo hizo en 2018, aunque seguramente quienes harían esa evaluación no serían ni Massive Caller ni Enkoll ni ninguna otra encuestadora conocida, sino el propio equipo de Morena. También se mediría la presencia mayoritaria del género para equilibrar, entre los estados que estarán en juego, la participación de hombres y mujeres.
En Guerrero, como se ha dicho, parece que la preminencia es masculina, pues las aspirantes mujeres -siempre según las encuestas conocidas, y esto en los dos partidos- todavía quedan un poco lejos de los hombres. En ese sentido, es probable que el género mujer se vaya hacia los estados donde haya preminencia femenina.
Sin embargo, y pese a estas previsiones, existen versiones que no sería bueno soslayar, en el sentido de que, tanto en Morena como en el PRI, se analiza la posibilidad de postular una candidata.
Específicamente, se habla de dos designaciones provenientes de la Ciudad de México: la secretaria de la Función Pública, Irma Eréndira Sandoval Ballesteros por Morena; y Claudia Ruiz Massieu Salinas, por el PRI. Ambas, aunque originarias de la entidad, han desarrollado su vida política en la capital del país y muy poco se les ha visto en Guerrero. Claudia compitió por la senaduría hace siete años, pero perdió. Aunque es hija del exgobernador José Francisco Ruiz Massieu -o quizá también por eso- no logró levantar y la fórmula en que acompañaba a René Juárez Cisneros quedó derrotada por la del PRD, y solo él logró el escaño. De los dos partidos, Morena tiene también como figura femenina a la alcaldesa de Acapulco, Adela Román Ocampo, quien gobierna a un tercio de la población del estado.
Para Manuel Añorve la posibilidad de competir y ganar es harto difícil, porque Morena concentra en Guerrero su mayor fortaleza, pero para otro priista sería doblemente difícil. Por una parte, el PRI tendría que valorar si le conviene ir a la elección sin su principal captador de votos, que sería Añorve; y por la otra, Añorve debe valorar si le conviene más mantenerse en el Senado para ver pasar de lejos lo que queda del tsunami morenista en Guerrero.
En Morena, la decisión podría basarse en el análisis de si este partido puede solo, sin llevar como abanderado, a su personaje más popular. En teoría, la encuesta dice que sí, porque Morena tiene un gran nivel de aceptación como partido, superior a sus contrincantes. En ese escenario Félix Salgado tendría que valor si puede encabezar con éxito a otro partido de los aliados con Morena (PES, PT o ahora el PVEM) para competir sin tener que salirse de la Cuarta Transformación.
Son escenarios, solamente, por supuesto. Todavía falta mucho tiempo para las definiciones. El PRD, que no es muy tomado en cuenta, en realidad tampoco es un fantasma, al menos en Guerrero, aunque haya estado a punto de perder su registro a nivel nacional. En el PRD la interrogante es qué papel va a jugar el ex gobernador Ángel Aguirre Rivero.
Mientras se acerca el 2021 las definiciones van a irse marcando. Ya se verá cómo se decantan las decisiones en las cúpulas, y cómo reaccionarán las fuerzas locales en la entidad.
