* Mientras no se empiece por indagar qué publicaba el comunicador víctima de agresiones, la impunidad continuará, dice Diego Martínez Valor
SCARLETT ARIAS /
Chilpancingo, 13 de abril de 2017. El encargado del Programa de Protección y Defensa de la organización Artículo 19, Diego Martínez Valor, expuso que el periodismo en Guerrero ha juntado graves embates y un constante retroceso en materia de libertad de expresión.
En entrevista para La Plaza, dijo que en Guerrero cada vez es más frecuente que las y los periodistas sean agredidos en el ejercicio de la libertad de expresión y que se busque a toda costa callar información que da cuenta de irregularidades por parte del estado o por grupos delincuenciales.
Martínez Valor detalló que el caso del periodista Cecilio Pineda Birto, asesinado en el municipio de Pungarabato en marzo, en la zona de la Tierra Caliente, es uno de los tres casos que documentó la organización este año por la gravedad del esquema que tenía dentro del Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas de la Secretaría de Gobernación.
El defensor recordó a que las medidas que le otorgó el mecanismo a Pineda Birto en cuanto a la reubicación temporal por el riesgo que corría en el ejercicio periodístico no fueron constantes.
Explicó que cuando Pineda Birto se negó a legítimamente a las medidas el mecanismo de protección,este debió en ese momento brindarle alternativas que solucionaran el problema.
Criticó que por el contrario fue el mecanismo quien se lavó las manos al justificar que Pineda Birto se negó a la seguridad y que por lo tanto le fueron retiradas.
Se demuestra que el Mecanismo no está cumpliendo con su deber, que es el de proteger a los y las periodistas en estas condiciones, puntualizó.
Expresó que a pesar de que se haya denunciado un riesgo anterior se puede acceder a este tipo de crímenes.
Es preocupante que la Secretaría de Gobernación no atienda y no brinde seguridad para las y los periodistas del estado pues es una preocupación que estén fallando todos los mecanismos institucionales en general en el país, recalcó.
Cuando un periodista se puede niega legítimamente a cierto plan de Protección que ofrece este mecanismo, tendrá que buscar las medidas adecuadas y no dejar al periodista a la deriva o a su suerte, remarcó.
El representante del Programa de Protección y Defensa de la organización explicó que medidas tan duras como la reubicación temporal del periodista tienen un impacto emocional grande que también puede alejarloo de otros esquemas que estarían en contra de la función del mecanismo porque generan revictimización, y generan un estado psicosocial adverso.
El mecanismo no investiga cuál podría ser la fuente de las amenazas o el origen del peligro y eso abona a que continúe la impunidad por lo que se estaría dando un mensaje equivocado, en el que un periodista puede ser asesinado sin ningún tipo de castigo, reclamó.
«Demuestra que el mecanismo presenta graves falencias, y presenta un contrastante retroceso en lugar de avanzar cuando en este contexto en México debería obligar a lo contrario», preciso.
Desde que un periodista denuncia amenazas se debe investigar está línea periodística, qué era lo que informaba, cuáles era sus investigaciones y de ahí partir para encontrar a los responsables antes de que la violencia escale, enfatizó Martínez Valor.
No ha sido así en Guerrero ni en el país, se ha desvirtuado la labor periodística, por tanto, hasta que no se tome como base esta línea como principal, seguramente seguirán ocurriendo cualquier cantidad de agresiones en contra de la prensa y seguramente la impunidad continuará, remarcó.