* La declaratoria ocurre al margen de la sociedad y las mujeres, asegura
HERCILIA CASTRO /
Zihuatanejo, 25 de junio de 2017. El Taller de Desarrollo Comunitario (Tadeco), criticó que la Alerta por Violencia de Género en Guerrero, se dé previo al proceso electoral de 2018, y en medio de un clima de descrédito del gobierno estatal por el clima que se sufre por la violencia.
El Tadeco, a través de un comunicado señaló que fue la Secretaría de Gobernación quien emitió la alerta de género “prácticamente a espaldas de la sociedad y principalmente para sorpresa de las organizaciones sociales y de mujeres que desde hace meses habían lanzado su propia alerta y evidenciado el grave riesgo en que viven las mujeres guerrerenses como efecto de la violencia de las empresas radicales del narco”.
Tadeco recalcó que la violencia de género, efecto de la violencia por el narco, es asociada con las instancias gubernamentales y el sentimiento machista que el mismo fenómeno ha exacerbado en la sociedad patriarcal y capitalista en la que se vive.
“Esta alerta de género que en principio parecería atender la demanda de vida y seguridad de las mujeres guerrerenses y que dejará relativamente satisfechas a algunos colectivos feministas, se da al margen de la misma sociedad y de las mujeres, que son las más interesadas, desde una posición de poder, arrogante y de aparente buena voluntad, propia de la acción política del Estado, que impondrá un conjunto de políticas públicas, armará un costoso aparato burocrático y establecerá desde arriba un conjunto de acciones”, enfatizó.
El Tadeco recalcó que la alerta no afectará para nada la raíz económica, social y cultural del grave problema que es el feminicidio, de la misma manera que ha pasado con el resto de las víctimas por violencia, con la Ley General de Víctimas y la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) y sus versiones estatales, e incluso con la estrategia nacional de la participación ciudadana.
“En todos estos casos, la gran ausente es la sociedad, que finalmente es la más afectada y sigue siendo menospreciada, tratada con soberbia, arrogancia y mediante mecanismos de control social, mediatización y burocratización, que no sólo no resuelven la raíz de los problemas, sino que protege a los perpetradores de los delitos de lesa humanidad, perpetúa las estructuras de poder vertical, patriarcal y capitalista y para decirlo en términos coloquiales regionales, le da atolito con el dedo a ciertos sectores que aplaudirán el engaño y disfrutarán de algunos paliativos con cómplice entusiasmo”, recalcó.
El taller consideró que la única solución es la organización de hombres y mujeres “desde abajo y a la izquierda que construya desde la rebeldía y la resistencia al capitalismo nuevas relaciones de género y generacionales, nuevas formas de producción y relación económica justas y equitativas y gobiernos de hombres y mujeres que manden obedeciendo”.
Cuestionó si servirá de algo la alerta de género y “si quienes la han impulsado de corazón y quienes hemos acompañado esa lucha seremos capaces de orientarla para que les dé seguridad de vida a las mujeres y verdad y justicia a las víctimas de la violencia social, en tanto vamos construyendo esa nueva sociedad a la que aspiramos”.
