* No hay reporte de años por el momento; el gobierno estatal activó protocolos ante la posible emergencia
REDACCIÓN /
Acapulco, 16 de febrero de 2018. En la pantalla del ordenador las letras empezaron a bailar. No, en realidad, no eran las letras, era todo el monitor.
-¿Está temblando?
La voz, una pregunta en modo de afirmación, parecía querer negar lo evidente: un nuevo sismo se dejaba sentir. Así se vivió en la redacción de La Plaza. A través de la ventana, una bandada de pájaros alzó el vuelo, en franca estampida. Los botellones de agua para beber, de 20 litros, parecían haber cobrado vida en su interior, con olas demasiado auténticas para ser reales.
De acuerdo con el reporte del Sismológico Nacional, lo que ocurrió fue un sismo de magnitud 7.2 localizado al sur de Pinotepa Nacional, Oaxaca a las 17:39.
En Guerrero, según datos del Centro Estatal de Alertamiento, el movimiento telúrico se percibió fuerte en los municipios de la región de la Costa Chica, Zona Norte, Centro, y Acapulco; y se sintió de moderado a fuerte en las regiones Costa Grande y Tierra Caliente.
El gobernador Héctor Astudillo Flores informó que se activaron los protocolos de emergencia ante el sismo, sin embargo, una hora después, no había reportes de daños en la entidad.
A su vez, en su cuenta de Twitter, el presidente Enrique Peña Nieto informó que “tratándose de un sismo de más de 7 grados, por protocolo se instala el Comité Nacional de Emergencias en el Centro Nacional de Prevención de Desastres”.
Algunos videos empezaron a circular en redes sociales. Uno de ellos es la imagen de una alberca en la azotea de un edificio, donde el agua se movía parecido a como se movió en Xochimilco durante el terremoto del 19 de septiembre.
El secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete Prida, señaló que no había reportes de daños, pero que se sintió muy fuerte en Guerrero y Oaxaca, y dijo que en ese momento él se trasladaría por vía aérea a Pinotepa Nacional, donde fue el epicentro, para evaluar los efectos del sismo.