* La periodista, directora de Los Ángeles Press, es víctima de una campaña de agresiones por internet, denuncian
REDACCIÓN /
Ciudad de México, 21 de julio de 2020. Organizaciones No Gubernamentales defensoras de derechos humanos expresaron su respaldo a la periodista Guadalupe Lizárraga Hernández, directora de Los Ángeles Press, ante una campaña de ataques que está recibiendo vía internet.
En una carta pública, auspiciada por la Red Solidaria Década Contra la Impunidad, las organizaciones firmantes denuncian que la comunicadora ha venido sufriendo “doxing (práctica en Internet que publica información privada con el propósito de intimidar, humillar o amenazar), como bots con tuits”.
Como resultado de estos ataques, en las redes sociales se dio a conocer los nombres reales de sus padres, de su hermana mayor, su dirección particular, incluso dónde vivían sus padres cuando la periodista y defensora de la libre expresión era niña, así como las escuelas donde estudio, intervenciones quirúrgicas como sobreviviente de cáncer, refiriéndose a su hija como “bastarda”; y a su apariencia física como grotesca, a su color de piel, alusiones a su sexualidad, y a la precaria condición socioeconómica de su niñez. Parte de estos ataques continúan hasta el día de hoy en las redes sociales, establecen las ONG.
La carta está suscrita, entre otras, por la Afadem-Fedefam, la Coordinadora Nacional Plan de Ayala (CNPA), la Organización Campesina de la Sierra del Sur (OCSS), Los Otros NY, Asamblea Popular de los Pueblos de Guerrero (APPG), el Consejo Federal Ejecutivo Nacional e Internacional del Frente Pro Derechos Humanos AC, por supuesto la Red Solidaria Década Contra la Impunidad.
Además firman personalidades como el dramaturgo Humberto Robles, Éricka Zamora Pardo, sobreviviente de la matanza de El Charco, María Magdalena López Paulino, Norma Mesino Mesino, Efrén Cortés Chávez, María Soledad Hernández Mena; y agrupaciones religiosas como Comunidad Teológica de México, Comunión Mexicana de Iglesias Reformadas y Presbiterianas AR, Iglesia Vetero Católica, y algunas más.
Guadalupe Lizárraga tiene una larga trayectoria en el periodismo. En 1996 fundó la revista Transición, y trabajó como becaria de la Maestría, en el periódico El País, y mantuvo un programa en MVS en México. Ha desarrollado varias investigaciones periodísticas relevantes, como el seguimiento del Caso Wallace, donde su labor ha permitido conocer la turbiedad en torno al manejo de María Elena Wallace y su protector el ex presidente Felipe Calderón.
En su carta, las organizaciones demandan al Estado mexicano la protección para la integridad física y psicológica de Guadalupe Lizárraga, y de todos los periodistas y reporteros en México, subrayando que el pasado 12 de julio en el marco del 176º Período Ordinario de Sesiones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), organizaciones defensoras de derechos, denunciaron el riesgo permanente en que se encuentran los periodistas y comunicadores en México.
