* El candidato a gobernador debe ser, como Morelos, “siervo de la nación”, pero “por muy importantes que sean sus intereses, no pueden estar por encima del pueblo”, dice
REDACCIÓN /
Acapulco, 14 de agosto de 2020. Lo primero que hizo el presidente Andrés Manuel López Obrador cuando fue interrogado sobre el proceso de selección de candidato de Morena al gobierno de Guerrero, fue desmarcarse: “Sobre las elecciones, yo no me ocupo de eso”, dijo.
Luego precisó que el próximo gobernador debe ser, como Morelos -a quien originalmente confundió con Guerrero- debe ser un “siervo de la nación”. Esta mención generaría más tarde una andanada en redes para decir que se estaba refiriendo al delegado federal Pablo Amílcar Sandoval Ballesteros, quien encabeza a la red de “servidores de la nación”.
El presidente precisó que “cualquier servidor público tiene que ser siervo de la nación”, sin embargo “por muy importante que sean los intereses personales, por muy legítimos que sean, no pueden estar por encima del interés general”, y por otra parte en las mismas redes, esto sirvió para que algunos dijeran que en realidad, había en el mensaje presidencial una mención al delegado, pero de descarte.
López Obrador mencionó otras características que debe tener quien vaya a gobernar Guerrero, o Oaxaca o cualquier otro lugar del país: “tenerle amor al pueblo, sincero amor al pueblo” pero con la condición de que sea “profundo amor, sobre todo a la gente humilde, a la gente pobre; sincero, no fingido, no simulado”.
Criticó a los políticos que “empiezan a abrazar cuando van a haber campañas y se desviven ahí, con la gente; una vez que llegan allá al cargo, no les vuelven a ver ni el pelo, ya hasta cambian. Otra ropa, otra actitud, otro peinado, hasta se engominan, se ponen moco de elefante, ya caminan… los ve uno desde lejos. Se vuelven presumidos, prepotentes, y lo peor: corruptos”.
Dijo que este tipo de personaje que “si vivía en una casa modesta, inmediatamente cambio a una residencia, y luego, departamento en Miami. Ya no pueden andar con un carro normal, tiene que ser carro de lujo, y rodeado de barberos, de alcahuetes, de lambiscones, para sentirse importantes”.
Consideró que Guerrero es un estado con mucha historia, que ha hecho aportaciones importantes a las transformaciones del país, y “merece gobernantes de primera. Esto es mucho pueblo, mucho pueblo, para que no se tengan los gobernantes que están a la altura. Por eso comencé hablando que el gobernador de Guerrero ha hecho un trabajo ejemplar, entonces eso los que vengan, sean del partido que sean, tienen que atender a la gente, aquí, en Guerrero, en Oaxaca”.
La gente, dijo, “muchísimas veces lo que quiere es que se les escuche y merece ser escuchado el pueblo, y tenerle toda la paciencia al pueblo. Yo estoy seguro de que Guerrero va a tener, va a seguir con buenos gobiernos, porque lo merece este pueblo. Aquí no hay motivos para fallar, no se le puede fallar, no se puede fallar al pueblo de Guerrero”.