«Por algo estamos listos para empezar desde cero, y nadie se arrodilla sobre los pámpanos caídos».
Mario Benedetti
MARCOS PAZ GÓMEZ /
Acapulco, 27 de noviembre de 2022. Acto I (Que debería ser penúltimo)
El contingente logró llegar exactamente al zócalo del puerto, pequeño en número de personas, pero enorme en valor y arrojo, pues ante los intentos de disuadirlos no se amedrentaron y siguieron adelante en exigencia de sus derechos.
El número innecesario de funcionarios luciendo guayaberas blancas y personajes perfumados con lociones caras y expresiones estupefactas era por más evidente, probablemente pasaba por sus cabezas el ¿Cómo chingaos lograron llegar hasta aquí?
Acto II (Que debería contar de otra manera la anécdota)
Alguien más allá de ellos sabe qué es lo que piden, los funcionarios encargados del área de gobernabilidad interna, los funcionarios al interior del organismo público paramunicipal se han puesto a estudiar e intentar estar atentos al desarrollo de las fuerzas vivas o solo están vegetando para ver qué es lo que logran obtener, como siempre chantajeando o dejándose chantajear por los charros.
Por qué la primera autoridad del municipio reaccionó de la manera más ruda (por no decirlo de otra forma), en verdad ¿duele acaso más un desfile que el respetar los derechos de la clase trabajadora? ¿la conmemoración artística y teatral de una Revolución traicionada es más importante que buscar cumplir con las demandas que desencadenaron en 1910 un proceso político-militar que se saldó con cientos de miles de vidas? ¿acaso es válido que la izquierda, así sea la más laxa, light y simplona electoralmente hablando, se olvide que una máxima de ella es «a trabajo igual salario igual»?
Acto III (De las demandas)
Lo que este grupo representativo de trabajadores exige, entre otras cosas, es el respeto básico a sus derechos y entre esto tienen el decoro de luchar por algo tan básico, una seguridad social con la que ahora no cuentan, saben muy bien que a ella no podrán aspirar, acaso es justo que trabajadores que tienen 20, 25 o 30 años laborando en el organismo público llamado CAPAMA (Comisión de Agua Potable y Alcantarillado del Municipio de Acapulco) NUNCA podrán pensionarse y vivir, o intentar sobrevivir, en el aliento último de sus vidas con dignidad. Acaso es justo que por no querer ser parte de la corrupción al interior de dicho organismo dominado en su totalidad por una camarilla de mafiosos que se autonombran representantes de los trabajadores, pero en los hechos hacen lo contrario, ese sindicato charro y esquirol.
Es esto una de las iniciales motivaciones que tuvieron para reunirse, platicar de sus necesidades, comentar sus lamentos y a la sombra de cualquier árbol del trópico tuvieron el sueño de conformar un sindicato independiente, auténtico, que buscará representar a los trabajadores en defensa de sus derechos y no extorsionarlos, chantajearlos, es así como nació el sindicato rojo acaso, ¿es el abuso y la falta de respeto a la clase trabajadora lo que dio origen al STOOAEG?
Acto IV (Del trayecto a lo que sucedió)
El grupo de aproximadamente 30 personas inicialmente, conforme se incrustó en el desfile de manera pacífica, (probablemente no diplomática) escaló lentamente hasta la curva del fuerte de San Diego, ahí frente a el parque de la reina un par de funcionarios de la dirección de Gobernación municipal intentaron detenerlos, pero como no había forma, lograron superar ese primer filtro.
A paso lento, pues varios de los que asistían son adultos aquejados por enfermedades, muchas de ellas contraídas a lo largo de sus años laborales al interior del organismo público paramunicipal, no tenían otra meta puesta en su andar que pasar el mismo trayecto del desfile; cosa curiosa que siendo un sindicato Rojo de izquierdas llevarán en ese momento de insignia al inigualable anarquista Ricardo Flores Magón, ese mismo que la 4T a nivel Nacional rendía homenaje y colocaba su imagen en todos los documentos, este sindicato hacía suya no la festividad oficial para dar el combate, hacía suyo al revolucionario radical de Ricardo para demostrarle al poder, municipal en este caso, que como ellos mismos iban gritando «¡Si Flores Magón viviera, con nosotros anduviera!».
Metafóricamente, Ricardo volvió a marchar para estar presente en la defensa de los trabajadores y no en una conmemoración simple y alejada del rigor histórico de la vida del hombre más indómito, del oaxaqueño más radical.
Acto V (Del coraje de la primera autoridad)
Conforme llegaban a las inmediaciones del zócalo los funcionarios y paleros del poder en turno ubicado en el parque papagayo corrían, se movían, trataban de disuadir de la protesta que pacíficamente iban desarrollando y llevaban a cabo estos trabajadores afiliados al Sindicato Rojo.
Cuando se acercaban a donde estaba el presídium compuesto por funcionarios, y donde abundaban las guayaberas blancas recién adquiridas; ¿quién les dio la creencia a los funcionarios de que utilizar siempre el blanco o guayaberas para los eventos los vuelve representantes del pueblo?, ¿de verdad asumen que la ropa vuelve a la persona en alguien importante?
Quién dio la orden para que la banda municipal siguiera tocando con el afán de no permitir que se escucharán las demandas de la protesta que había logrado duplicar el número inicial de manifestantes, como bien lo dijo un trabajador orgulloso de pertenecer al STOOAEG, “si no se callan no nos vamos a ir”.
Es la necedad de respeto o el afán de llevar la dignidad por delante la que mueve a estas mujeres y hombres libres que buscan se les respeten sus derechos.
Al mismo tiempo que sucedía esto, el camarada que funge como secretario general del STOOAEG, acompañado de un miembro de dicho sindicato, le entregaban a la Primera Autoridad de Acapulco, Abelina López Rodríguez, un oficio con sus demandas, el porqué estaban ahí y la necesidad de entablar una mesa de trabajo para dialogar, la respuesta de la presidenta municipal no fue otra que el evidente enojo y molestia, en cuatro palabras demostró que no estaba cómoda con lo que acababa de presenciar, soltó un «PRIMERO TRABAJEN, HUEVONES, TRABAJEN».
Acto VI (Previó a la retirada)
Si las autoridades se molestan con que un desfile alejado de representatividad popular y que solo sirve para recordar un acto histórico, acto en el que por cierto ninguno de los funcionarios vestidos de blanco cree, cómo esperan esos mismos funcionarios insensibles que reaccionen los trabajadores cuando todos los días se levantan a trabajar y se parten el lomo con las precarias herramientas, se meten a reparar fugas con el agua hasta el cuello, incluso cuando los charros hicieron un paro para desestabilizar está administración, estos trabajadores rojos fueron los únicos que salieron a dar la cara y cumplieron con sus actividades, cómo esperan las autoridades que hombres y mujeres después de 25, 30 años laborando, con enfermedades contraídas en el mismo trabajo no podrán jamás pensionarse, pues CAPAMA, su consejo de administración, y la primera autoridad, mantiene a trabajadores de Primera y Segunda Clase.
Cómo esperan estos funcionarios esquiroles que la clase trabajadora reaccione ante el nulo respeto a su trabajo y sus derechos, si a las autoridades les dolió que un desfile se saliera del guion y no todo fueran aplausos y rosas, cómo esperan estos obtusos funcionarios que reaccionen los trabajadores ante la evidente necesidad de respeto.
Acto VII (Volveremos)
Después de unos minutos y el análisis respectivo de las palabras de la presidenta, del «PRIMERO TRABAJEN, HUEVONES, TRABAJEN», deciden retirarse, saben bien que ahí nada obtendrían de respuesta a sus peticiones, pero están conscientes que lograron hacerse notar y que por un momento rompieron el guion, en estos ánimos mundialistas, podríamos decir que quienes sentados en el presídium se sentían Argentina en el mundial, recibieron un balde de agua fría por parte del Sindicato Rojo, que le jugó de tú a tú al poder, fue pues, como el inesperado resultado donde Argentina perdió con Arabia Saudita 2-1, para el mundial la anécdota va a quedar ahí y sin embargo, para estos trabajadores lo suyo no es anécdota, para ellos es apenas el inicio de una rebelión popular, ellas y ellos saben que ¡la lucha sigue!