• La joven habría sido asesinada por asfixia por quien fuera su pareja, un piloto militar
• El Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan señala que José Luis Martínez Rodríguez, quien fue esposo de Melani, es favorecido por la jueza Evelina Ramírez Venegas
MARISOL WENCES MINA /
Acapulco, 24 de julio de 2024.- De acuerdo con una denuncia pública del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan en conjunto con el Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio, se cuestiona la imparcialidad de la jueza Evelina Ramírez Venegas en el caso de feminicidio de Melani Ibarra López, quien estaría incurriendo en favoritismo hacia el presunto culpable por tener amistad con el abogado que lo defiende.
Melani, hija de Martín Iván Ibarra Talamantes y Jovita Celina López López, era estudiante de ingeniería en minas cuando conoció a José Luis Martínez Rodríguez, piloto aviador de la fuerza aérea, con quien decidió casarse,
La pareja se trasladó a vivir a la unidad habitacional conocida como Pedregal de Cantaluna, ubicada en la colonia El Pedregoso, en el poniente del puerto de Acapulco. Según el comunicado de Tlachinollan la joven se dedicó al cuidado de la casa y a su esposo, con quien tuvo un hijo.
Sin embargo, el imputado “cada vez se volvía un hombre machista, posesivo, controlador, narcisista y violento que a menudo la agredía física y psicológicamente. La madrugada del 28 de noviembre del año 2017, Melani se encontraba con su esposo en la recámara principal del segundo piso del departamento, este la empezó a maltratar, la discusión subió de tono, la tomó de los cabellos y azotó contra la puerta, después la tiró al piso ahorcándola con ambas manos hasta provocarle ruptura del hueso hioide y asfixia perdiendo la vida. José Luis la llevó a las escaleras que dan al primer piso, dejando el cuerpo en los escalones para simular una caída accidental, horas más tarde pidió ayuda. Cuando los médicos revisaron el cuerpo presentaba rigidez por que llevaba varias horas de muerta. El esposo trató de borrar toda evidencia que lo incriminara”, se lee en el texto compartido en el comunicado.
Martínez Rodríguez, según la denuncia, intentó borrar toda evidencia que lo incriminara, impidiendo que las autoridades ingresaran a la escena del crimen y tratando de incinerar rápidamente el cuerpo de Melani. Contrató a un médico particular para que elaborara un certificado médico a modo en el que dice que murió por causa naturales.
En enero de 2023, José Luis fue detenido y procesado. El juicio oral inició el 12 de abril de 2024 en el Juzgado de enjuiciamiento penal de Acapulco, a cargo de Evelina Ramírez Venegas.
El Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan expresó su preocupación por la parcialidad de la jueza Ramírez Venegas, quien, subraya, ha mostrado un trato preferencial hacia la defensa y ha maltratado a los testigos de la acusación, incluido el padre de la víctima.
Entre los puntos que señalan a la jueza están que “las objeciones y debates son resueltos a favor de la defensa aun cuando no le asista la razón. En audiencia maltrató al padre de Melani cuando rindió declaración como testigo. A una perita que habló de los ciclos de violencia que vivió Melani trató de obligarla que dijera si era feminista. Cuando el ministerio público y la asesoría jurídica llegan tarde pese a ser una causa justificada, se les llama la atención mientras a la defensa se le tolera su impuntualidad recurrente. Varios testigos han sido declarados desiertos de manera categórica sin dar oportunidad al ministerio público de localizarlos y presentarlos a la audiencia y a menudo viola el principio de contradicción dado que no le da intervención a la asesoría jurídica en el debate”.
“Es público que la juez pertenece al círculo de amistad del defensor del imputado en la ciudad y puerto de Acapulco. Este tiene una escuela de litigantes a la que a menudo la Jueza acude a impartir cursos a los letrados. Esas relaciones de amistad explicarían la parcialidad de la Jueza en un caso sumamente delicado donde se requiere tener perspectiva de género y ser empática con la situación de violencia que vive la mujer. Es deber de los Jueces y autoridades remover las barreras estructurales que enfrentan las mujeres para acceder a la justicia”, señaló Tlachinollan.
La actuación parcial de la Jueza Evelina Ramírez Venegas, señala la organización, “parece contribuir a fortalecer los mensajes de impunidad a los feminicidas”.