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  • Se violó el Código Canónico; el obispo «ya no tiene coherencia», asegura Ricardo Liquidano
  • ¿Qué compromisos tiene? ¿por qué acelera?», se pregunta el coordinador del Consejo Parroquial
  • ¿Quién le habrá dicho que la prepotencia es la forma de resolver los problemas?», insiste

REDACCIÓN /

Ometepec, 07 de agosto de 2024. Integrantes del Consejo Parroquial de la iglesia de Santiago Apóstol señalaron que el nombramiento del párroco Pedro Torres García como titular de la parroquia, es inválido pues se violó el Código de Derecho Canónico, que establece tres condiciones para hacer un relevo, las cuales no se cumplieron.

En conferencia de prensa la tarde del martes, el coordinador del Consejo Parroquial, Ricardo Liquidano Rodríguez; la secretaria Aurora Ruiz Estrada; la coordinadora de Pastoral Social, Amada Ponce Lanche; y el representante de la sociedad civil parroquial, José María Camacho de la Cruz, expresaron su desacuerdo con el nombramiento.

Las condiciones para que se dé un cambio, dijeron, son la renuncia del actual párroco, un decreto de remoción, y la existencia de una sede vacante. Liquidano Rodríguez dijo que estos requisitos se cumplen mediante un proceso, pero el obispo Leopoldo González quiso hacerlo de un día para otro «y entonces no es posible que proceda este nombramiento».

Indicó que Cortés Torreblanca, como párroco depuesto, también tiene derecho a no renunciar «y no cae en la desobediencia», y aseguró que hay testigos de que él llevaba a la parroquia en un proceso de construcción y de paz. «El arzobispo, con todo y su jerarquía, queremos realmente pedirle que si hasta ahorita no ha querido escucharnos, no ha querido sentarse para que dialoguemos, para que como pastor y grey católica, podamos establecer de una manera muy abierta cómo está la situación, entonces pedimos una instancia superior, no nos queda otra», señaló.

Dijo que «respecto a la violencia que se está presentando, no nos queda de otra, tenemos que resistir». Agregó que «sinceramente ya el obispo que tenemos, no tiene coherencia», por lo que anuncó que recurrirán a otra instancia, como un visitador, un interventor o el nuncio apostólico.

Liquidano Rodríguez aseguró que en los hechos del martes, el obispo no hizo ningún gesto para evitar el enfrentamiento entre seguidores de ambos párrocos, y en cambio, en la marcha que él encabezó, la avanzada venía como un equipo de guerra, e incluso los sacerdotes que lo acompañaban, refrendaban esta actitud.

Aseguró que los que rechazan la remoción de Miguel Cortés «no estamos en desobediencia» sino están pidiendo algo que es de justicia, y acusó que los sacerdotes que hay en los alrededores de Ometepec han estado persiguiendo incluso a la familia del sacerdote Miguel Cortés. «Hay muchos videos y hay mensajes de personas que están atacando a la iglesia desde hace tiempo», aseguró.

«Veamos cuál es el fondo del asunto, ¿qué compromisos tiene el arzobispo? ¿por qué acelera? Hay 20 años que estuvo el padre Miguel Ángel Covadonga, no lo cambiaron; cuántos sacerdotes con más de siete años y con problemas fuertes, no los han cambiado, porque los han apoyando. Aquí al padre Miguel Ángel todo lo contrario, no le han mandado ni siquiera un sacerdote auxiliar para atender todos los compromisos».

A pregunta de los reporteros sobre quién está organizando estas protestas contra el cambio de párroco, Liquidano dijo que cuando se enteraron del cambio, le preguntaron al sacerdote si él renunciaría y este dijo que no tiene por qué renunciar. Entonces unos decidieron apoyar la decisión del obispo y otros decidieron seguir un proceso para impedir la remoción.

«No podemos permitir una injusticia, aunque venga de una autoridad, como el obispo», señaló. Dijo que quizá habría bastado con una breve explicación de su parte y la gente hubiera tenido que aceptarlo, pero en cambio no los recibe y cuando platican, se para y los deja hablando y se va. «No sé quién le dijo al arzobispo que la prepotencia es el camino para resolver las cosas. Hay muchas personas que con su poder, amilanan a cualquiera, pero en este caso no es así, en la Iglesia Católica no es así», señaló.

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