- Se atendió a damnificados, pero solo en las áreas urbanas, al campo no ha llegado la ayuda, dicen
- Coinciden en el reclamo el líder morenista Eloy Cisneros y el priista Evencio Romero
ROBERTO RAMÍREZ BRAVO /
Acapulco, 03 de septiembre de 2024. Campesinos de Acapulco y Coyuca de Benítez, entre ellos autoridades municipales y ejidales, denunciaron que el campo en ambos municipios se encuentra excluido de la ayuda para la recuperación por los daños causados por el huracán Otis el año pasado.
En una conferencia de prensa, en la que coincidieron -incluso colocados a los extremos de la misma mesa- el dirigente de la priista Liga de Comunidades Agrarias en el estado, Evencio Romero, y el dirigente del Frente Progresista Guerrerense, de filiación morenista, Eloy Cisneros Guillén, los campesinos, entre comisarios municipales y ejidales, y ganaderos, señalaron que la pérdida total de cultivos de ciclo corto, como maíz y frijol, y de ciclo perenne, como palmeras, mango o tamarindo, así como la pérdida de ganado mayor y menor “ha provocado que muchas familias se encuentren en pobreza extrema” y han tenido que emigrar a Estados Unidos.
En un comunicado que fue leído a nombre de 20 comunidades agrícolas de Acapulco y 10 de Coyuca de Benítez, que dijeron representar, se hace un reconocimiento al apoyo del presidente Andrés Manuel López Obrador después de la tragedia, pero “aún hay cientos, quizá miles de familias damnificadas por el huracán Otis que no han recibido los apoyos anunciados”, y rechazaron las declaraciones de la secretaria de Bienestar, Ariadna Montiel Reyes, en el sentido de que las afectaciones por el huracán ya fueron atendidas. “Con todo respeto, le decimos que el campo no tuvo ningún apoyo como el otorgado a otras entidades federativas que han sido afectadas; le demandamos que nuestros derechos en el campo sean reivindicados”, señala el documento.
En las participaciones individuales, Cisneros Guillén, al hablar en representación del FPG, señaló que “hemos recorrido algunos lugares y está totalmente abandonado, ni siquiera se han ido a parar para hacer una evaluación de los daños ocasionados por el Otis. Vemos en todos lugares en Acapulco, en Coyuca de Benítez, cómo se ha marginado a una gran cantidad de compañeros, a los cuales todavía, a esta altura, no se les ha entregado sus enseres”, por lo que hizo un llamado al presidente Andrés Manuel López Obrador para que en el último mes que le queda, instruya a quien corresponda, que esto no quede en el olvido.
A su vez, Evencio Romero, señaló que el presidente López Obrador instruyó que se atendiera al campo, pero las autoridades encargadas “hicieron caso omiso”. Dijo que “el campo de Acapulco está parado, no produce; se llevaron miles y miles de ganado, se llevaron embarcaciones, palmeras tiradas que todavía están ahí en las huertas, parotas que no pueden pasar, no pueden limpiar”. Señaló que hubo una reunión con funcionarios en la que se acordó que en 15 días se realizaría una mesa de trabajo con la gobernadora, pero eso fue hace un mes y no hay respuesta aún por parte del gobierno del estado.
Fernando Muñoz, ganadero de La Sabana, dijo que “estamos sumidos en la miseria, desde el año pasado no tenemos cosecha, no ha llovido; y creo que no va a llover tampoco este. ¿Con qué vamos a alimentar a nuestro ganado, nuestros cerdos? ¿Qué vamos a ir a vender al mercado nosotros, no hay limón, los que sembraron mango, qué van a vender? No van a poder subsistir, compañeros, ¿qué es lo que va a pasar? Lo que no queremos todos, que nuestros jóvenes sumidos en la desesperación quieran hacer cosas indebidas, uniéndose en grupos, quizá haciendo, asaltos, qué sé yo, muchas cosas, por la necesidad tan grande que existe, y que va a existir si las cosas no se resuelven”.
Julio Ortiz Ochoa, ex comisariado ejidal de Tres Palos, expresó que antes ganaba 80 mil pesos cada tres meses, con su producción, y ahora acaba de vender lo que produjo, en 7 mil pesos. “No es por presunción, pero yo puedo decir que tenía asegurada mi vejez en la cuestión económica; hoy me doy cuenta de que no hay nada seguro, que la naturaleza se porta implacable en algunos momentos como fue el huracán Otis”, señaló.
Entre los asistentes a la conferencia estuvieron el presidente del comisariado del ejido de Tres Palos, Efrén Guevara Toledo; el presidente del Sistema Productor Porcino del Estado de Guerrero, Juan Carlos Ocampo; el comisario de San Isidro Gallinero, Felipe Neri Moreno; el comisario suplente de Amatillo, Susano Gaspar Antonio; el presidente del comisariado de los bienes comunales de Cacahuatepec, Efraín Dorantes Vélez; el ex comisario de Salsipuedes, Marcelo Enríquez Román.
También estuvieron el presidente de la Asociación de Porcicultores del Estado de Guerrero, Onofre Sebastián de la Ros Cruz; el presidente de la Asociación Ganadera de Acapulco, Francisco Ricart Rodríguez; el comisario municipal de El Bejuco, Simón Campos Villanueva; el comisario de Tixtlancingo, Florentino González Mateo; y el de El Zapote, Praxedis Valle, entre otros.
María Esther Ortiz, porcicultora de La Sabana, señaló que los productores de ganado porcino perdieron todo, pero unos perdieron más que otros. «Nuestras galeras son de lámina; volaron todas las láminas, se nos murieron animales, se nos mojó todo el alimento, perdimos el puntero, hemos tenido que pedir préstamos, fiado, como sea para poder sobrevivir y para poder no dejar morir a nuestros animales. Tenemos una compañera porcicultora que fue avasallada. Todos los porcicultores perdimos, pero hay otros que perdimos más que otros. Esa compañera ahora en vez de porcicultora, anda vendiendo chile y Jamaica porque no se ha podido recuperar; después de tener 62 vientres, ahora solo tiene tres porque nos pidió de favor que se los compráramos a precio de rastro», señaló.
En términos generales, los campesinos, productores, ganaderos, denunciaron que las autoridades de los tres niveles no han atendido sus casos a pesar de que ha habido encuentros y compromisos, por lo que adelantaron que si continúa esta marginación en el apoyo hacia el campo tomarán otras medidas, aunque no precisaron cuáles serían.
Sobre el total de los montos de las afectaciones, señalaron que no hay una estimación, aunque el gobierno debe tener un censo de los daños. El dirigente de los porcicultores, dijo que este sector tiene en Acapulco un cálculo de 9 millones de pesos en pérdidas, desde Amatillo hasta Pie de la Cuesta, y aparte están los de Coyuca de Benítez. A su vez, Julio Ortiz Ochoa, productor de Tres Palos, dijo que una estimación de daños es de 500 millones solo en su ejido, sin contabilizar los demás.
