*Pide analizar con “cabeza fría” los resultados del sexenio de López Obrador. Hace hincapié en el empoderamiento de las mujeres.
MARISOL WENCES MINA /
Acapulco, 01 de octubre de 2024.- En su primer discurso como presidenta Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, Claudia Sheinbaum Pardo, prometió no defraudar al pueblo y abogó por el empoderamiento de las mujeres, la seguridad y la soberanía energética. Ante el Congreso de la Unión, y tras recibir la banda presidencial de manos de la presidenta de la Cámara de diputadas y diputados, Ifigenia Martínez (quien la recibió a su vez del expresidente Andrés Manuel López Obrador), Sheinbaum reafirmó su compromiso de consolidar un México más justo, democrático y soberano.
Sheinbaum Pardo hizo historia al convertirse en la primera mujer en asumir la presidencia de México. Vestida de color marfil y con el brazo en alto, Sheinbaum, de 62 años, juró cumplir y hacer cumplir la Constitución ante el Congreso de la Unión.
En el acto celebrado en el Palacio Legislativo de San Lázaro, Sheinbaum reconoció a López Obrador como el mejor presidente de la historia moderna de México. Agradeció su liderazgo y afirmó que continuará su legado con el modelo de “humanismo mexicano”, orientado hacia el bienestar del pueblo. Asimismo, aseguró que no habrá retrocesos en los avances logrados en los últimos seis años en materia de reducción de la pobreza, creación de empleo y fortalecimiento de la economía.
La presidenta hizo un llamado a analizar «con cabeza fría» lo ocurrido en los últimos seis años del gobierno de López Obrador. La presidenta destacó la importancia de evaluar los resultados con objetividad, reconociendo los avances alcanzados, pero también los retos que quedan por superar. Enfatizó que este análisis será fundamental para continuar con la transformación del país.
Sheinbaum subrayó que su gobierno garantizará derechos fundamentales, incluyendo la igualdad sustantiva para las mujeres, la protección del medio ambiente y la defensa de los derechos humanos. Enfatizó que su administración será democrática y austera, y que continuará la lucha contra la corrupción y los privilegios.
La presidenta Constitucional de México, aseguró que se mantendrá la estrategia de seguridad basada en la justicia social, fortaleciendo la Guardia Nacional y rechazando las políticas de militarización. «Quien crea que la Guardia Nacional, estando en la Secretaría de la Defensa, es militarización, está totalmente equivocado», afirmó, subrayando la coordinación con municipios, estados y la Fiscalía General de la República.
La mandataria reiteró su compromiso de garantizar la paz a través de una estrategia basada en cuatro ejes: atención a las causas sociales, fortalecimiento de la inteligencia y la investigación, consolidación de la Guardia Nacional bajo un mando civil. Aseguró que no se repetirá «la irresponsable guerra del narco de Calderón», y destacó su éxito en la Ciudad de México, donde los homicidios disminuyeron en un 50% bajo su gobierno, dijo.
En el ámbito económico y energético, Sheinbaum se comprometió a promover la eficiencia energética y la transición a fuentes renovables. «El objetivo de Pemex seguirá siendo 1.8 millones de barriles diarios», explicó, enfatizando que la producción de 3 millones de barriles, como proponía la reforma energética, es ambientalmente inviable. En su lugar, la nueva administración promoverá la eficiencia energética y las energías limpias, subrayó.
Sheinbaum Pardo también destacó la importancia de avanzar en la soberanía alimentaria, reiterando la prohibición de la siembra de maíz transgénico en el país. «No permitimos la siembra de maíz transgénico, seremos autosuficientes no sólo en maíz blanco, sino en otros cultivos», sostuvo.
En términos de innovación, la presidenta subrayó la necesidad de convertir a México en una potencia científica y tecnológica, apoyando las ciencias básicas, naturales, sociales y las humanidades, y vinculándolas con sectores prioritarios para el desarrollo nacional. «Las mexicanas y los mexicanos tenemos creatividad y capacidad de sobra», aseguró.
El evento contó con la presencia de jefes de Estado, invitados especiales y legisladores de diversas fuerzas políticas. Aunque hubo gritos de apoyo por parte de los legisladores de Morena, los miembros de la oposición permanecieron en silencio.
En un emotivo mensaje, Sheinbaum rindió homenaje a las mujeres que han luchado, tanto de manera pública como anónima, por sus derechos y el progreso social. Al concluir su discurso, visiblemente emocionada, declaró: «Soy madre, soy abuela, científica y mujer de fe, y a partir de hoy, por voluntad del pueblo de México, la presidenta constitucional de los Estados Unidos Mexicanos. No les voy a defraudar».