- El 27 de septiembre amanecimos sin carretera; para cruzar, había que usar una cuerda, con el agua en el cuello
REDACCIÓN /
Coyuca de Benítez, 02 de octubre de 2024. En la noche del 26 de septiembre había carretera, y al amanecer del 27, ya no había.
Es la carretera federal Acapulco-Zihuatanejo, a la altura de los poblados Los Cimientos y Pénjamo, en el municipio de Coyuca de Benítez, que dejó incomunicada totalmente a la Costa Grande con Acapulco al fracturarse como consecuencia de las lluvias que dejó el huracán John, de categoría 3.
Un vecino que vivió de cerca este proceso, relató que el 26 de septiembre por la noche el huracán dejó sentir su fuerza sobre Coyuca de Benítez, con las intensas lluvias que se dejaron caer sobre el municipio. El poblado de Los Cimientos quedó prácticamente inhabitable al ser inundado, y la carretera cedió en dos tramos entre este poblado y Pénjamo.
Era imposible cruzar. Hasta el 28 por fin fue posible hacerlo, pero a pie, atravesando el río, y con el agua prácticamente al cuello. Los pobladores utilizaban cuerdas para sujetarse y pasar de Pénjamo hacia Coyuca a comprar víveres, y viceversa.
Los taxis colectivos, y los autobuses del transporte público que circulaban de Zihuatanejo o Atoyac con dirección a Acapulco, se detenían en el Oxxo de Pénjamo y ahí dejaban a sus pasajeros, los cuales, si querían cruzar, debían hacerlo en las difíciles condiciones del momento.
Los trabajos de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), comenzaron casi de inmediato, y finalmente, el martes lograron restablecer el paso vehicular, con un paso provisional.
Así se vivió la pesadilla de la incomunicación con la Costa Grande.
Crédito fotos: The Rommers
