* Los aguirristas se reagrupan; lo mencionan para la alcaldía de Acapulco
* Otros lo ven apoyando a López Obrador vía Ebrard; y en Acapulco impulsando a sus alfiles
ROBERTO RAMÍREZ BRAVO /
Acapulco, 06 de agosto de 2017. El ex gobernador Ángel Aguirre Rivero se prepara para volver a la palestra política, dicen los integrantes del que fue su equipo.
De acuerdo con políticos cercanos al ex mandatario, hay dos escenarios en los que está trabajando en estos momentos: buscar la candidatura a la presidencia municipal de Acapulco a través de Movimiento Ciudadano y eventualmente en una alianza con el Partido de la Revolución Democrática, o participar de manera discreta en el partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena) en la campaña de Andrés Manuel López Obrador, de manera muy cercana con el ex jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard Cassaubon, quien se encuentra en Estados Unidos y podría coordinar alguna parte de la campaña del tabasqueño.
A la par, el aguirrismo promueve sus propias piezas a través de personajes cercanos al ex mandatario: uno es Víctor Aguirre Alcaide, quien desde el PRD ha planteado que aspira a la candidatura a la presidencia municipal del puerto, y amenaza con un choque de trenes con el alcalde Evodio Velázquez Aguirre, quien también quiere el mismo espacio a través de la reelección.
Contra todo pronóstico, otro cuadro aguirrista que se promueve hacia la candidatura a la alcaldía, aunque para algunos solo podría llegar a una diputación o una regiduría, es el líder transportista Rogelio Hernández Cruz.
Para obtener esta información se cruzaron datos entre personajes que han sido y que son cercanos a Aguirre Rivero, entre los cuales hay algunas discrepancias, pues unos señalan que el ex mandatario “no está con el ánimo” de participar en estos momentos. Otros rechazan esta postura pues afirman que él sigue siendo un zoon politikon, un animal político, como diría Aristóteles, y una muestra es la especie de apadrinamiento hacia Víctor Aguirre Alcaide, con quien se reunió un poco antes de que este empezara su campaña en busca de la candidatura perredista a la alcaldía.
La reciente alianza entre la Izquierda Progresista de Guerrero (IPG), que creara su hijo Ángel Aguirre Herrera, con Alternativa Democrática Nacional (ADN), señalan, es otro reacomodo del aguirrismo para fortalecerse tras el fallecimiento de sus dos principales dirigentes, Aguirre Herrera y Demetrio Saldívar.
“Ángel Aguirre Rivero es de todo Guerrero”, dice uno de los principales operadores del ex gobernador, cuando se le pregunta si es cierta la versión de que buscaría la alcaldía de Acapulco. Luego, a condición de no ser citado, afirma, lacónico: “sí”. La versión de Aguirre Rivero como alcalde del puerto no es nueva, incluso se manejaba cuando estaba por concluir su período como gobernador, antes de la desaparición de los 43 normalistas.
Víctor Aguirre se mueve abiertamente con la venia del ex gobernador. El 9 de mayo pasado publicó en su cuenta de Facebook una fotografía con él en la que ambos aparecían sonrientes y poco después empezó a moverse con miras a ganar la candidatura.
Igual lo hace Rogelio Hernández Cruz, quien publicita una foto suya con un auditorio lleno en el Centro Acapulco y el eslogan que el ex gobernador usó como frase de gobierno en su primer período: Un nuevo horizonte para Guerrero.
Para otros, sin embargo, todo es una cortina de humo, y lo que realmente hará el ex gobernador es operar con López Obrador por una razón muy sencilla: no operaría para Manlio Fabio Beltrones u Osorio Chong en el PRI; no lo haría por Margarita Zavala o Ricardo Anaya en el PAN; en cambio, sí lo haría por López Obrador –aunque en 2012 lo dejó solo, y el tabasqueño lo negó en 2014- por su cercanía con Marcelo Ebrard.