* El senador dijo que su esposa tiene méritos propios, “no necesita vejigas para nadar”
* Ganó el distrito IV federal después de 18 años que el PRI no ganaba, y que no lo ha vuelto a ganar, recuerda
ROBERTO RAMÍREZ BRAVO /
Acapulco, 19 de febrero de 2021. El senador priista Manuel Añorve Baños afirmó que sería “una falta de respeto” el que él hubiera negociado en la mesa la candidatura de su esposa la ex diputada federal Julieta Fernández Márquez a cambio de “mi paz política” tras no haber ganado la candidatura al gobierno del estado.
En un encuentro con reporteros de distintos medios de comunicación, Añorve Baños dijo que Fernández Márquez “no es ninguna improvisada” y tiene su propia ruta política. Inclusive, ejemplificó con que el equipo político que lo acompaña a él es distinto al que la acompaña a ella e incluso, dijo, Fernández Márquez “tiene una movilidad a veces distinta a la que yo tengo en la sociedad civil: ella vale por lo que ella ha construido políticamente en su vida y en su trabajo social en Acapulco”.
El legislador guerrerense y ex aspirante a la candidatura al gobierno del estado, dijo cuando Julieta Fernández fue diputada plurinominal hubo críticas desde adentro del PRI que señalaban que llegó al cargo por dedazo. Sin embargo, “creo que se les calló la boca a los de adentro y de afuera cuando ganó el IV distrito (federal) después de 18 años que no ganaba el PRI y que no hemos vuelto a ganar. Hubo candidata, hubo trabajo político y hubo un triunfo, cerrado, pero existió el triunfo indiscutible”, dijo.
En consecuencia, advirtió: “Ella tiene los méritos de levantar la mano y aspirar a la alcaldía de Acapulco. Sería muy torpe pensar que yo estoy condicionando Acapulco sólo porque se me ocurrió”.
Añorve Baños habló sobre varios temas según las distintas preguntas que le formularon los reporteros. De Mario Moreno, el candidato de la alianza PRI-PRD, dijo que es su amigo, que nunca se confrontaron durante el proceso interno, y ahora lo está apoyando con la estructura que él encabeza en todo el estado. No asistió cuando fue designado candidato porque tenía compromisos familiares contraídos de antemano, dijo, pero recordó que Mario Moreno tampoco asistió cuando él fue postulado al Senado, y no hubo ningún problema entonces ni ahora.
Dijo sin embargo que la elección que viene va a ser compleja, y para que los dos partidos no tengan problemas con sus respectivas bases, van a tener que practicar la inclusión, aunque destacó que Mario Moreno está muy receptivo en ese sentido.
Alertó que no se debe centrar toda la atención en la gubernatura, porque en realidad habrá cuatro elecciones simultáneas (gubernatura, diputaciones federales, diputaciones locales y alcaldías), y si se piensa que la matemática del resultado electoral de 2018 va a dar el triunfo en los mismos lugares donde se ganó.
Donde se va a poner como cabeza al PRD, añadió, se debe cuidar a la militancia del PRI; y al revés, donde encabece el PRI, se debe cuidar a la militancia perredista. “Esa es la base de la pirámide: las presidencias municipales, y tenemos que avocarnos todos a cuidar nuestra base electoral; si no hacemos el trabajo de inclusión real de las dos fuerzas políticas, se nos puede ladear una pirámide, y creo que no le conviene a ninguna de las candidaturas”, acotó.
Añorve Baños dijo que “no estamos compitiendo a ver si ganamos; estamos compitiendo para ganar una elección”.
Apoyo federal a Guerrero; Astudillo hace malabares para salir
En otros temas, demandó mayor apoyo de la Federación para atender el sector salud en Guerrero. El gobernador Héctor Astudillo, dijo, está haciendo malabares, más de lo que puede hacer, para poder contener la pandemia, pero requiere recursos extraordinarios urgentes que debe darle el gobierno federal.
“Son tiempos donde ya el gobierno federal nos debe mandar un guiño a los guerrerenses. Ahorita sería convenientes recursos extraordinarios para el estado, inclusive para los municipios” porque las afectaciones del Covid han sido grandes.
Indicó que está impulsando la comparecencia ante el Senado de la secretaria de Energía, Rocío Nahle y del director de la Comisión Federal de Electricidad, Manuel Barlett Díaz, y el subsecretario de Salud, Hugo López Gatell.