* La construcción afecta al medio ambiente, mencionan
SANTIAGO HERRERA /
Acapulco, 23 de enero de 2018. Comuneros de los bienes comunales de Cuautepec exigieron a la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) que cancele el proyecto de una unidad deportiva que ha comenzado a construir el ayuntamiento de Cuautepec pues indicaron que afecta el medio ambiente.
Acusaron que aunque la Profepa ya había clausurado los trabajos para la construcción de la unidad deportiva por afectaciones al medio ambiente, la administración municipal volvió a reanudar los trabajos tras presentar un documento con firmas supuestamente de comuneros que aprobaban el proyecto, pero señalaron que cuando se dio la asamblea para la recolección de firmas, no acudieron comuneros, sino empleados del ayuntamiento.
Debido a ello la secretaria del comisariado de los bienes comunales de Cuautepec, Gisela Armenta Abarca, el presidente del consejo de vigilancia, Pablo Flores Rendón, el asesor del comisariado de los bienes comunales de Cuautepec, Ramón Gracida González y otros comuneros se presentaron en las oficinas de la Semarnat y la Profepa ubicadas en el palacio federal para sostener una reunión.
En entrevista previa a la reunión Gracida González indicó que los comuneros presionaron al presidente municipal con licencia, Emanuel Gutiérrez Andraca para que realizara una asamblea, la cual llevó a cabo el 30 de octubre de 2016, pero señaló que fue una “asamblea amañada donde la mayoría no eran trabajadores sino trabajadores del ayuntamiento”.
Detalló que la Profepa y la Semarnat impusieron una sanción al presidente municipal la cual consistía en el pago de 450 mil pesos por los daños ocasionados y de la reforestación del lugar, así como la reunión de 10 reuniones en las comunidades para disculparse por el “crimen ecocida”.
En ese sentido denunció que los trabajos de la unidad deportiva fueron reanudados por el ayuntamiento en diciembre del año pasado amparándose en las firmas recolectadas por los supuestos comuneros, motivo por el cual en el lugar ya fueron derribados árboles y todo tipo de vegetación.
Por último señalaron que en la reunión que sostendrían con Profepa y Semarnat denunciarían las irregularidades del proyecto, así como de la destrucción de cinco hectáreas de árboles y vegetación.
