*La antropóloga feminista, quien fue creadora e impulsora del término feminicidio y de la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia en México, tuvo que resguardarse en una sala ante la irrupción violenta de decenas de personas
MARISOL WENCES MINA/
Acapulco, 20 de marzo de 2024. La conferencia de la antropóloga y feminista Marcela Lagarde en la Universidad Complutense de Madrid (UCM) fue interrumpida por un grupo de manifestantes que exigían un “enfoque más inclusivo del feminismo”. Los supuestos estudiantes, algunos de ellos encapuchados y ondeando banderas del colectivo trans y no binario, irrumpieron en el aula con gritos y proclamas a través de altavoces y sirenas, según se puede observar en videos que circulan en redes sociales.
La conferencia se llevaba a cabo en el marco de la adhesión de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociología a la Cátedra Internacional Marcela Lagarde y de los Ríos y se vio abruptamente interrumpida por consignas como «fuera TERFs de la universidad» y «aquí está la resistencia trans». Estas voces se alzaron en medio del discurso de Lagarde, una de las figuras más prominentes del feminismo latinoamericano, conocida por su serenidad y su enfoque pacífico en la lucha contra la violencia de género.
La situación escaló rápidamente cuando los manifestantes, en un acto de protesta, interrumpieron la ponencia de Lagarde, quien fue invitada para hablar sobre la genealogía feminista. A pesar de no haber abordado temas relacionados con las personas que se identifican como no binarias o transgénero, la conferencia se vio sacudida por este acto de disrupción. Las panelistas, incluida la propia Lagarde, se vieron obligadas a resguardarse en una sala de juntas mientras la decana María Esther del Campo García intentaba mediar sin éxito.
Tras una pausa de más de treinta minutos, la conferencia se reanudó en otra sala, donde Lagarde pudo culminar su ponencia. En una muestra de su característico carácter sereno, Lagarde evitó entrar en debate y, en cambio, expresó su compromiso con la construcción de paz y derechos humanos. «Saqué de mi vocabulario la palabra combate», declaró, subrayando la necesidad de alejarse del «lenguaje hostil, destructivo y agresivo».
Lagarde, quien ha sido una de las primeras teóricas en impulsar el uso de términos como «sororidad» y «feminicidio», ha jugado un papel crucial en la introducción del delito de feminicidio en los códigos penales de México y en la promoción de la Ley General de Acceso a las Mujeres a una Vida Libre de Violencias. Sus palabras resonaron con un llamado a la unidad y al entendimiento: «No estoy en la trinchera ni en el combate por la violencia contra las mujeres y las niñas», sino en «la construcción de paz y de derechos humanos».
En redes sociales circulan videos donde se ve cómo fue interrumpido el acto, mientras que en el canal de YouTube de la Universidad Complutense está la conferencia en su segundo momento, después de la interrupción. Lagarde concluyó su intervención recordando que ningún camino se transita sola y que todos sus logros son el resultado de un esfuerzo colectivo. Con ello, reivindicó la «búsqueda de la comunidad, del contacto, del sumar otras opciones y analizarlas, no guerrear, sino entendernos en el sentido más profundo de la palabra».