* En La Providencia cobran hasta 500 pesos por permitir el paso, y no dejan entrar víveres ni medicamentos, señalan vecinos
REDACCIÓN /
Acapulco, 15 de abril de 2020. Habitantes de Piedra Imán y los llamados Pueblos Santos denunciaron que la cuarentena obligatoria que impusieron en el primer poblado, que impide el tránsito por la carretera que une a estas poblaciones con la vía federal México-Acapulco “nos está matando de hambre”.
A través de una llamada telefónica, relataron que el comisario de Piedra Imán y pobladores de esa comunidad -ubicada al norte de Acapulco- establecieron un retén a la entrada del pueblo en la carretera que sale del Kilómetro 42 y que pasa por Piedra Imán y comunica a los llamados Pueblos Santos (San Miguel, Santa Bárbara, Santa Rosa, San Cristóbal, etcétera, algunos que son de ya pertenecen a otro municipio, como Coyuca de Benítez), para impedir el paso de personas y evitar con ello contagios por la pandemia de Coronovirus (Covid 19).
Sin embargo, relataron que no solo evitan la llegada a Piedra Imán sino también al resto de los pueblos que se encuentran en la parte alta.
El problema empieza cuando se convierte en un asunto económico más que de salud, dijeron, ya que en realidad sí se está permitiendo el paso, pero solo a quienes pagan una cuota que puede llegar hasta 500 pesos, y 5 mil para quienes llegan para quedarse con sus familiares.
Lo que no se está permitiendo es pasar víveres ni medicamentos, cosas que se tienen que conseguir en Acapulco porque en la zona son escasos y muy caros. Por ejemplo, señalaron que el huevo se está vendiendo a 100 pesos el kilo, como este año hubo problemas con la entrega del fertilizando, muchos campesinos no lograron producir y no tienen maíz de reserva.
Hicieron un llamado a la presidenta municipal Adela Román Ocampo, para que se investigue la situación y se levante ese retén o se permita el paso de personas y de víveres, si bien guardadas las medidas sanitarias correspondientes.
Aseguraron que esa carretera es la única vía para acceder a la región, ya que por Xaltianguis no se puede porque hay hombres armados acechando en el camino, y lo mismo sucede por Tlacotepec.
En Piedra Imán, señalaron que buena parte de la población se forma por jornaleros que vienen de otras comunidades a trabajar, pero en estos momentos por la situación generada por la pandemia, no hay trabajo y la gente está desesperada, clamando por ayuda.