* Los asistentes que no tuvieron cabida con ninguno de los 20 ediles, son congregados en este lugar
REDACCIÓN /
Acapulco, 03 de octubre de 2018. Parecería una leyenda urbana, de no ser porque está ahí, visible y tangible. Se trata de un pequeño espacio supuestamente destinado para juntas, pero que a decir de los trabajadores, no se utiliza. Incluso, tiene una loseta levantada, y manchas de humedad en las paredes.
Le llaman “la regiduría 21”. En cabildo con 20 ediles, esa sería la regiduría fantasma.
El espacio físico se remonta a la remodelación que hizo el gobierno de Luis Walton Aburto, cuando se crearon dos pequeñas espacios en las salas de regidores (A, del lado de la Presidencia; y B, del lado del estacionamiento), para que los regidores hicieran uso de ellas para reuniones. Pero la de la sala B es pequeña, por lo que todos prefieren utilizar la de la sala A.
Por eso, en este espacio abandonado se se reúnen los trabajadores que sobran o que no caben en las 20 regidurías oficiales.
Una regiduría es un espacio pequeño, como un local comercial donde apenas caben unas cuatro personas, pero un solo regidor tiene en promedio 20 asistentes, la mayor parte sindicalizados, aunque algunos son numerarios y otros cobran por lista de raya.
Juntos, no caben en una sola oficina, menos si el titular de la misma está presente y ocupa la mitad de ese espacio. En algunos casos, hay regidores que no quieren tener tantos auxiliares y los ponen a disposición de personal, pero físicamente, mientras se ubica qué hacer con ellos, los auxiliares deben estar en algún sitio.
… Y van a la regiduría 21.
Es un misterio cuántos auxiliares –que cobran su salario con normalidad- no están asignados a ninguna de las 20 regidurías. A veces se les ve en la salita de la regiduría 21, a veces no van ni a pararse al Ayuntamiento.
Su existencia sorprendió a los nuevos regidores, principalmente a los de Morena, que no habían tenido representación antes en el Cabildo.
