* Ni en la Costa Chica ni en la grande hay indicios ni de las despensas ni de los comedores, dice el presidente del Frente Progresista Guerrerense
* “No sé dónde las entregan, porque no hemos visto”, afirma
* En Cruz Grande -dijo- el gobierno del estado le mintió a la gente con el caso del hospital
ROBERTO RAMÍREZ BRAVO /
Acapulco, 23 de agosto de 2020. El presidente del Frente Progresista Guerrerense -organización que aglutina a otras organizaciones sociales en el estado-, Eloy Cisneros Guillén, criticó el desempeño del gobierno del estado en la atención a la pandemia de covid 19 en las comunidades marginadas de la entidad.
En entrevista en las oficinas de la agrupación, el profesor jubilado de la Uagro, ex diputado local y dos veces preso político, señaló que la pandemia de coronavirus ha acrecentado la situación de marginación en las comunidades de Guerrero y la gente “tiene mucho miedo” de que el virus anide en algunas personas cercanas porque no tienen cómo hacerle frente.
Dijo que la solidaridad de las organizaciones y de gente que sí tiene ingresos, más los programas que ha desarrollado el gobierno federal y el gobierno municipal en el caso de Acapulco, han contribuido a paliar la situación.
-¿El gobierno del estado ha estado a la altura de estas circunstancias en la pandemia? -se le pregunta.
-Que yo sepa, no he visto el apoyo real del gobierno del estado, porque donde quiera que vamos, no hay información de que el gobierno del estado, por ejemplo, esté poniendo comedores para la gente que menos tiene, que esté atendiendo a los adultos mayores, buscando llevarles algo de comer o que esté repartiendo despensas verdaderamente a los que no tienen qué comer. No lo he visto, la verdad, no lo he visto, y naturalmente nosotros siempre hemos hecho el llamado a los gobiernos para que pongan su capacidad, mucha o poca, al servicio de la gente y en este caso, se requiere, se necesita.
-El gobernador ha dicho que están entregando despensas, ¿no las están entregando a la población, o no sabe cómo las están entregando?
-Pues no sé dónde las entregan, porque donde hemos ido, no se ha visto, y precisamente hay protestas de los compañeros, que no les llega. No les escurre ese apoyo que el gobierno debe darle a la gente, contrario aquí en Acapulco que la administración municipal empezó a darle despensa a la gente más jodida, más humilde, y se instalaron más de 35 comedores que sirvieron a la gente que no tenía que comer. Pero hemos recorrido parte de la Costa Chica y parte de la Costa Grande y no hemos visto, pues, no hemos visto con objetividad, el apoyo del gobierno del estado.
El dirigente planteó que, como medida para paliar los efectos de la pandemia en la economía, se requiere buscar los apoyos de los créditos blandos. Puso como ejemplo el caso de una tamalera que durante la cuarentena se comió el puntero de los tamales y luego ya no tiene para comprar la materia prima para volver a hacerlos.
“Desafortunadamente -dijo- la pandemia a nivel internacional ha creado mucha incertidumbre en la sociedad y ha afectado en gran parte sobre todo a la gente que menos tiene. Hicimos la semana pasada un recorrido por la Costa Chica, particularmente Marquelia, Copala, Cruz Grande y San Marcos, y encontramos una buena cantidad de personas que tienen el padecimiento, y que desgraciadamente no se ha tenido la atención necesaria en unos hospitales”.
El hospital de Cruz Grande
Cisneros Guillén también se refirió al caso del hospital de Cruz Grande, que el presidente Andrés Manuel López Obrador ofreció construir, y que fue presentado como centro de salud ampliado, por lo cual la gente protestó. “Encontramos en Cruz Grande una protesta de los compañeros habitantes de la población, porque nos manifestaban que han estado siendo engañados por el gobierno del estado, que les ofrecieron la construcción de un hospital y que no es un hospital sino simplemente un sanatorio, y creo que eso indigna a la gente cuando se les engaña”, dijo.
“No conozco el lugar -agregó-, ni conozco cómo está construido, ni los servicios que va a tener. Pero la gente la verdad, porque así se le informó, así se le dijo, estaba esperando un hospital regional, y no lo que se les construyó y los servicios que va a dar. Además, no sé si la inversión haya sido aplicada totalmente, porque bueno, eso no tenemos forma de cómo evaluarlo nosotros. Pero lo que sí se ve, es que a la gente se le engañó, y eso es lo más grave, a la gente no tiene por qué engañársele, a la sociedad no tiene por qué mentírsele”.