* Afirma el nuevo dirigente que “no vengo a dividir”, y “se equivocan quienes pronostican el declive” del partido
REDACCIÓN /
Chilpancingo, 15 de agosto de 2020. Alberto Catalán Bastida asumió este sábado la dirigencia estatal del Partido de la Revolución Democrática en Guerrero con un compromiso: “Llegó el momento -dijo- de enmendar los errores que como partido político se han cometido”.
En su discurso de toma de protesta, afirmó que “los retos que demanda el próximo proceso electoral no son menores ni sencillos”, sino que demandan unidad interna pero sobre todo, “la construcción de un proyecto político competitivo, cercano a las causas sociales, a los reclamos de injusticia y demandas de progreso para nuestra entidad”.
Hizo entonces un llamado a enarbolar ese proyecto “surgido desde las bases sociales”. Por eso, dijo, “no he llegado a dividir a ningún grupo; por el contrario, honraré la confianza que me han conferido, privilegiando este acuerdo de unidad y trabajando desde ahora por el fortalecimiento partidario”.
Llamó a los liderazgos naturales a “no decaer en ánimo, a ser leales y no caer en ofertas o tentaciones políticas ajenas” y anunció que “desde hoy, las puertas del PRD estarán abiertas para quienes decidieron concurrir hacia otras fuerzas políticas en años anteriores”.
En todo caso, advirtió que “se equivocan las voces que pronostican el declive del Partido de la Revolución Democrática; si bien es cierto que la elección de 2018 nos dejó lecciones sobre los cambios que Guerrero y México necesitan, es igual de cierto que la concreción de estos cambios está plagada de errores y contradicciones”.
