* Reveló que continúan las amenazas contra funcionarios de su administración y algunos prefieren renunciar
REDACCIÓN /
Acapulco, 30 de enero de 2019. La presidenta municipal, Adela Román Ocampo reveló que continúan las amenazas contra funcionarios de la administración municipal y por ese motivo algunos prefieren renunciar, por lo que seguirán los cambios dentro de su gobierno.
«Cuando haya que haber cambios los tiene que haber, una administración tiene que renovarse», dijo en entrevista este día, al término de la sesión del Grupo Aca, a la que asistió para presenciar la toma de protesta del nuevo Consejo Directivo.
Román Ocampo señaló que algunos funcionarios le han presentado su renuncia porque reciben otras propuestas de trabajo, o porque no se sienten bien en el lugar donde están.
«Por ejemplo, ayer un compañero me decía ‘licenciada yo no quiero trabajar en este lugar, porque es muy peligroso y tengo miedo, le agradezco pero yo no puedo estar ahí’, entonces son circunstancias; si alguien se quiere ir, lamento las ausencias, pero el gobierno tiene que trabajar y seguir adelante», dijo.
La alcaldesa indicó que siguen los funcionarios de su administración recibiendo amenazas porque hay gente que se ve afectada por las medidas tomadas por su gobierno y que se siente protegida por la delincuencia.
«Hay amenazas anónimas, gente que se resiste al cambio, vendedores protegidos por la maña que se han apoderado de lugares en donde no deben estar pero los vamos a quitar», advirtió la alcaldesa.
Por otro lado, dio a conocer que presentará un informe de cuatro meses de gestión al frente del Ayuntamiento y el plan de austeridad que pondrá en práctica para resolver los problemas financieros del municipio.
«Quise romper con la figura de los 100 días, porque no puedes ver nada en ese lapso, más cuando encuentras una administración destruida, una administración sin recursos y donde todos los días tengo que pagar acreedores», dijo.
Adela Román Ocampo señaló que el ayuntamiento tiene problemas financieros muy fuertes y es difícil hablar de un plan de austeridad, cuando lo único que administra es pobreza.
