* Balbina Flores: las secuelas son traumas fuertes que derivan en tabaquismo, alcoholismo, pesadillas…
HERCILIA CASTRO /
Zihuatanejo, 3 de mayo de 2017. México tiene el 147 lugar de 187 países con riesgo en su ejercicio diario, y la violencia, causa un impacto diario en los comunicadores, dijeron organizaciones y colectivos.
Vía telefónica la representante de Reporteros Sin Fronteras, Balbina Flores señaló que el impacto dela violencia en los comunicadores se da por la inseguridad, la censura y el impacto a la autoestima.
“Tiene un impacto fuerte en los periodistas por su trabajo, hemos visto periodistas que tienen post traumas muy fuertes, que van desde el tabaquismo, el alcoholismo, las pesadillas, incluso en situaciones más graves, que son los ataques de pánico”, dijo.
Señaló que otra problemática son los ataques de ansiedad y que “nosotros siempre hemos dicho que a la par de la protección, debe ir la construcción emocional, porque si los periodistas debemos seguir haciendo nuestro trabajo, al menos en este momento, indudablemente tenemos que tener apoyo profesional, no porque se esté loco, sino porque la mente se va desgastando y es necesario una atención”.
“Tenemos casos de periodistas que en este momento están sufriendo estrés post traumático”, advirtió.
Aparte, el periodista guerrerense Kau Sirenio, miembro de Periodistas de a Pie, y del semanario Trinchera y colaborador de La Plaza, señaló que, aunque hay un auge en blogs, medios digitales, entre otros, el esfuerzo se ve sofocado por la violencia institucional y delictiva “a pesar de que hay una ley de protección a los periodistas, eso no ocurre en los estados porque los caciques hacen y deshacen las leyes en los estados y los municipios”.
Ejemplificó que estados como Morelos, Baja California, Michoacán y Veracruz, sufren una aguda violencia, sin contar Guerrero.
“Hay que organizarnos los periodistas, porque a la hora de la hora, nos gana el ego y no podemos unirnos porque a cada persona le ponemos una etiqueta”, dijo.
Sobre si la violencia inhibe al comunicador, consideró que “no debe de inhibirnos, al contrario, debemos de escribir más, pero debemos de buscar un mecanismo de cómo protegernos, porque los gobiernos no nos pueden callar o los servidores públicos, pero tampoco podemos excedernos si no tenemos un mecanismo real que nos proteja en nuestro trabajo”.
Del crimen organizado, Sirenio externó que se debe exigir al Estado, que se garantice el derecho a la libertad de expresión “porque no puede eludir el Estado, los cambios que les prometieron a quienes los eligieron”.
Sobre la violencia en Guerrero, recalcó que sí hay impacto en los reporteros de la entidad, comentó que “sí hay compañeros que han sufrido secuelas graves, por el simple hecho de verse amenazados, empiezan a tener problemas emocionales”.
“Muchos compañeros tienen paranoia, no quieren siquiera hablar del tema porque tienen miedo, y hay compañeros que han optado por dejar el oficio, o salirse del estado”, reveló.
Señaló que otro problema es cuando el reportero normaliza la violencia, incluso, que él tomó esa postura de “sí, hay muertos”.
Sin embargo, al salir a otra entidad, su percepción cambió al ver que no es normal el hacer parte rutinaria la violencia, y la insensibilización como la violencia.
Balbina Flores detalló que, en cuanto a la violencia de los comunicadores, la sufren más quienes están en estados más vulnerables, y esos, son los indicadores del impacto en su trabajo diario.
“Hay algunas situaciones que han contribuido al incremento de estas agresiones, en donde no hay una investigación de los asesinatos y desapariciones de periodistas, pero también de otros que son igualmente graves”, dijo.
Subrayó que el tema de la inseguridad, y la censura son los temas generales que explican lo que pasa en este país.
Flores señaló que deben de existir mejores garantías, capacitación y cuidados para contrarrestar las agresiones al gremio.
Recalcó que la primera responsabilidad de la protección de los periodistas corresponde al Estado y a las autoridades.
Sobre la Fiscalía Especializada en Delitos a la Libertad de Expresión (Feadle), de la Procuraduría General de la República y su instrumento de protección, recordó que “oficialmente se creó en 2006, precisamente por la presión de los periodistas, de las organizaciones para crear esta institución para defender a los periodistas”.
“Pero es una instancia que no ha sido lo suficientemente ágil, eficaz, en sus investigaciones y eso explica un poco el tema de la impunidad”, dijo.
Señaló que, de 200 averiguaciones previas, no se sabe si hay investigaciones o si realmente hubo alguna sentencia en cuanto a los delitos a la libertad de expresión.
“Mientras siga ocurriendo que no haya una sentencia o consignaciones a los periodistas, el mensaje no es contundente por parte de la autoridad”, recalcó.
Aparte, Sirenio exhortó a los reporteros a organizarse y capacitarse, encontrar estrategias que permitan la protección al gremio, sin dejar de exigir que el Estado, cumpla su función de respetar, y no violar, el derecho humano a la libertad de expresión.
El Día Mundial del Periodismo, proclamado en 1993 en la asamblea General de las Naciones Unidas (ONU), y como recomendación de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, Ciencia y Cultura (Unesco).
Tan solo en marzo, tres reporteros fueron asesinados, Cecilio Pineda Birto, en Guerrero; Miroslava Breach en Chihuahua, y Ricardo Monliu en Veracruz.
En abril, en Baja California, fue asesinado el reportero Max Rodríguez.
Y el pasado lunes, fue ejecutado el locutor Filiberto Álvarez Landeros, en el estado de Morelos.
En menos de dos meses de 2017, van cinco reporteros asesinados tanto por la delincuencia organizada o por previas amenazas de los gobiernos.
