CITLALI CALIXTO /
Acapulco, 19 de enero de 2021.
Sin duda, algo que ha caracterizado al gobierno de Andrés Manuel López Obrador, es su constante exposición a través de las mañaneras. En dichas conferencias, el Presidente informa los avances de la 4T, al mismo tiempo que responde cuestionamientos y críticas de los periodistas. De ese modo, este gobierno hace un innovador ejercicio de rendición de cuentas como ningún otro gobierno lo había hecho antes.
Desde sus inicios, las mañaneras han servido para transparentar asuntos de interés público, así como para fijar posicionamientos ante determinados eventos. No obstante, en los últimos meses también han resultado útiles para informar a la población sobre los avances de la pandemia por Covid-19 y de la Estrategia Nacional de Vacunación, así como de las decisiones que se toman en educación y economía. Evidentemente, estos son asuntos de interés público de carácter urgente.
Sin embargo, el pasado 11 de enero el consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova, generó polémica al señalar que una vez que inicien las campañas electorales, los medios de comunicación deberán suspender las transmisiones íntegras de las mañaneras. ¿El motivo? Que su contenido es propaganda gubernamental, lo cual está prohibido durante los procesos electorales según la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales.
Por desgracia, el INE parecería olvidar que la ley contempla excepciones a dicha regla cuando se trata de asuntos educativos y de salud, así como de la protección civil en casos de emergencia. Casos de emergencia como la pandemia mundial en que nos encontramos y que requiere de comunicación directa entre el gobierno y la ciudadanía.
Aunado a eso, el INE parece olvidar que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación ya se había manifestado al respecto en dos ocasiones el año pasado: el 2 de septiembre y el 23 de diciembre. En dichas resoluciones, el Tribunal anuló la suspensión que había solicitado el INE para los comicios de 2020 en Coahuila e Hidalgo, argumentando que “lo expuesto en las conferencias matutinas señaladas, corresponde a un ejercicio de preguntas y respuestas, amparados bajo la libertad de expresión y el derecho a la información”.
En ese contexto, nuestro presidente denunció que esta situación se trata de un intento de censura y de una grave violación a nuestro derecho a la información como ciudadanas y ciudadanos. De manera personal, coincido y expreso mi preocupación ante la coincidencia entre la postura del INE y de la oposición. Recordemos que el INE es un organismo autónomo que debe funcionar de manera imparcial garantizando una competencia justa sin violar nuestros derechos humanos. En este caso, su postura demuestra una insistencia infundada que pareciera buscar silenciar al gobierno justo cuando más necesita comunicar.
Ante la polémica, la noche del 15 de enero de 2021, el Consejo General del INE aprobó por mayoría, ordenar al presidente de la República, a los gobernadores y a los servidores públicos, abstenerse de hablar sobre el proceso electoral en sus actos públicos. Pese a la resolución, el presidente ya se limitaba a informar y responder cuestionamientos en sus conferencias. Nos tocará ver el curso que sigue este tema, después de todo, las elecciones que se aproximan son de suma importancia, pues renovaremos la Cámara de Diputados y 15 gubernaturas, incluida la de nuestro estado.
Mientras tanto, invito a la población a informarse, a defender su derecho a la información y a emitir su voto libre el próximo 6 de junio. Nuestro país merece elecciones dignas y justas, esperemos que el INE cumpla con ello.