* Ramón Navarrete lo agredió verbalmente cuando lo buscaba para pedir ayuda ante el intento de levantón contra un reportero, acusa Julio Vázquez
* Por ese incidente, dejó sin auxilio al reportero Abisdahi Romero, quien intentaba salir del estado porque había intentado ser secuestrado
REDACCIÓN /
Acapulco, 7 de enero de 2016. El secretario general de la sección 25 del Sindicato Nacional de Redactores de la Prensa (SNRP), Julio Vázquez Hernández, presentó una queja contra ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) el titular de la Comisión de Derechos Humanos de Guerrero (Coddehum), Ramón Navarrete Magdaleno, por agresión a su persona y por omisión en el apoyo a un reportero que había sufrido un intento de secuestro y cuya vida en ese momento se consideraba en peligro.
El dirigente se presentó en la sede de la coordinación regional de la CNDH, acompañado de los periodistas Andy García y Roberto Ramírez Bravo, ante el coordinador Hipólito Lugo. En su declaración, expuso que el martes 3 desde alrededor de las 9 de la mañana comenzó a buscar vía telefónica a Navarrete Magdaleno así como a otros funcionarios del área de seguridad, incluyendo a la CNDH, para tratar de obtener ayuda a fin de sacar de Guerrero al periodista Abisdahi Romero, director de Noticias de Radiorama Enlace Costa Grande, quien en la noche anterior había logrado a individuos armados que intentaban levantarlo, después de que en dos ocasiones anteriores también había sido perseguido en lo que el comunicador había interpretado como intentos de asalto.
Sin embargo, Navarrete Magdaleno no pudo ser localizado por vía telefónica ni a través de su oficina. Más tarde, un poco después del mediodía, Vázquez Hernández, quien estaba acompañado del mismo equipo del SNRP con quien había estado haciendo las llamadas, entre los que se encontraban los periodistas Roberto Ramírez Bravo y Claudio Vargas, se encontró casualmente con la coordinadora en Acapulco Fany Ruth Lara Figueroa, a quien le comentó que no había podido localizar a su jefe a pesar de que le envió desesperados mensajes aludiendo a la gravedad del caso, y luego se preguntó si no andaría “de vacaciones en Miami” y dijo que si por negligencia de la Coddehum algo le pasaba al reportero Abisdahi, le tomaría las oficinas.
Pero en realidad, para esa hora, Abisdahí ya empezaba a ser atendido por otras instancias, entre ellas la Comisión Nacional de Derechos Humanos, y esa misma tarde fue trasladado fuera de Guerrero.
Alrededor de las 7 de la noche de ese mismo martes 3, narró Vázquez Hernández, Navarrete Magdaleno le llamó por teléfono y le dijo, palabras más, palabras menos: “ahora sí, cabrón, dime a mí lo que le dijiste a la licenciada”, por lo que Vázquez le reclamó el tono en que le hablaba. “Chingas a tu madre, a mí no me tomas nada, tú eres un pendejo”, le habría dicho el presidente de la Coddehum, por lo que Vázquez, en respuesta, le colgó.
Al día siguiente, alrededor del mediodía, y después de concluir el acto conmemorativo del 94 aniversario del SNRP y Día del Periodista, Vázquez fue con un grupo de reporteros a la coordinación regional de la Coddehum. Hicieron la protesta, pero fue breve, porque las oficinas se encontraban cerradas.
Alrededor de esa hora, personal de la Coddehum buscó por otra vía el teléfono de Abisdahi Romero, para comunicarse con él, aunque desde la noche anterior el comunicador ya había iniciado los trámites para ingresar al Mecanismo de Protección para Defensores de Derechos Humanos y Periodistas y se encontraba fuera de Guerrero.
Así lo informó la Coddehum en un comunicado que emitió el 4 de enero por la noche, más de 24 horas después de que se requería su apoyo: que el comunicador estaba en los trámites de ingreso al Mecanismo, pero se lavó las manos arguyendo que la sede de su medio está en Michoacán y los hechos ocurrieron en Michoacán (en Lázaro Cárdenas, colindante con Guerrero), aunque admitió que el área de acción de la radiodifusora abarca la Costa Grande de Guerrero.
Vázquez Hernández dijo que acudió a presentar la queja porque consideró que el hecho no puede quedarse solo en una anécdota, ya que la Coddehum es el organismo obligado por ley a defender los derechos humanos y es a quien los periodistas (junto con los demás ciudadanos) va a acudir cuando se le necesite. Además, dijo, la llamada de Navarrete en ningún caso fue para indagar cuál era la situación delicada que se le había planteado en mensajes y a través de su oficina, sino para reclamar los comentarios hechos a la coordinadora.
También dijo que es delicado que la Coddehum haya intervenido tardíamente, cuando ya el caso se había solucionado por otras vías, porque el desenlace pudo haber sido fatal, y para cuando el organismo interviniera lo que podría haber dicho en su comunicado es que lamentablemente el periodista había sido asesinado.
Aclaró, sin embargo, que Abisdahi Romero pudo ser extraído de donde se encontraba con el apoyo de otras instancias, entre ellas la Secretaría de Seguridad Pública Federal, la CNDH, el vocero del Grupo de Coordinación Guerrero, Roberto Álvarez Heredia, que fueron quienes se movilizaron.
Finalmente, consideró irrelevante que la sede del medio esté en Michoacán –en la colindancia con Guerrero- y que la agresión haya ocurrido en Lázaro Cárdenas, pues lo importante era garantizar la vida del comunicador, no saber de dónde es el medio en que trabaja.