RAUL SUAREZ MARTÍNEZ /
Chilpancingo, 29 de agosto de 2020.
Alto, paren las especulaciones, no se trata de nada relacionado con Félix Salgado Macedonio ni campaña alguna. Siento por esta vez no complaceros.
Permitan que escriba otra vez, sí, otra vez, de algo personal. Algunos de mis cuatro lectores, dos voluntarios y leales, uno no tiene otra cosa que hacer y al cuarto le pago por leerme; bueno, pero alguno de ellos debe de saber que se ha organizado una Liga de Futbol alterna a la Liga Mexicana de Futbol, esta denominada Liga de Balompié Mexicana.
Acapulco será sede de un equipo de este deporte denominado con el nombre del puerto paradisiaco, Acapulco Futbol Club, el cual dará oportunidad a mi hijo Daniel Chilpo Suárez Miranda.
Es curioso, Daniel cuando jugó por primera vez en un equipo amateur semiorganizado aquí en la capital, este equipo ocupaba el uniforme de Santos Laguna, parecía un aviso. Cuando se va a probar suerte a un equipo profesional es precisamente Santos, quien le abre las puertas, los Guerreros del Santos Laguna, su mote.
Hace tres años, Daniel probó que su estirpe guerrera es indomable, peleó el partido más importante de su corta vida, ganó con creces, venció a la muerte. Como todo un guerrero, nunca se dio por vencido; con el apoyo de la familia y los amigos y amigas, aquí lo tenemos.
Hoy todo apunta que Daniel, un guerrero de la vida y de las canchas, regresará a participar en los Guerreros de Acapulco; un equipo que pretende representar a este estado suriano e impregnar de ese espíritu indomable que caracteriza a los guerrerenses, por eso el título de un Guerrero para Guerrero.
No sé, no tengo el don de predecir el futuro, no sé si el Chilpo será titular, eso no me corresponde decidirlo, lo único garantizado para ese equipo y su afición, es que van a tener un guerrero que no va a guardarse nada en los entrenamientos ni en la cancha, tiene esa visión, lo aprendió de los Guerreros de la Comarca, aunque es justo decirlo y quienes lo conocieron en las canchas de Guerrero, su espíritu de jugador siempre fue de alta competencia, no se guardaba nada y, esa será sin dudarlo su manera de brindarse en esta nueva oportunidad.
Ya no me interesa saber qué pudo haber pasado si hubiera tenido una mejor oportunidad en la Liga Mexicana de Fútbol hoy, su presente y espero que un gran futuro es con los Guerreros de Acapulco en la nueva Liga de Balompié Mexicano de la Asociación Nacional de Balompié Mexicano, equipo guerrerense que encabeza el Lic. Hoguer Alderete Ramírez.
En el evento de presentación de equipo el viernes 28 de agosto, la presidenta municipal de Acapulco, Adela Román Ocampo, invitada de honor, manifestó correctamente, que el deporte y en este caso el fútbol, debe de servir para arrancarle a la delincuencia a los niños y jóvenes, buscarles, a partir de que puedan destacar en este deporte, la oportunidad de ser una mejor persona, un mejor ser humano, que el deporte nos permita ayudar a restaurar el tejido social. Ya de manera personal Adela Román muy amablemente le comentó al Chilpo Suárez, ojalá te quedes en el equipo y, puedas ser tú, ejemplo para todos esos niños y jóvenes, que todo el equipo lo sea, pero, sobre todo, que los guerrerenses que tengan oportunidad de jugar, logren incidir en la sociedad guerrerense para bien.
Adela Román tiene toda la razón, necesitamos todas las herramientas para lograr que Guerrero tenga otra realidad y, el deporte, el fútbol en concreto puede ayudar, más si como pensamos logramos tener unos verdaderos guerreros para Guerrero.
